sábado, 10 de abril de 2010

Reflexion compartida

Queridos hermanas y hermanos en el trabajo en la espiritualidad y luz:

Ciertamente este 2010 nos ha localizado a todos nosotros en un estadio de transformación muy fuerte, en donde las corrientes de energía de la Tierra se encuentran aun más vivas buscando restablecer el balance que hemos destruido en nuestra inconsciencia humana. Así pues nos encontramos en un momento en donde podemos ver directamente representados su movimiento en nuestras poblaciones: Haití, Chile, Grecia, Taiwán y últimamente en las costas de Baja California Norte y norte de Sonora.

El llamado cada vez se acorta mas en distancia y la pregunta que es importante hacernos es si en este momento seguimos aun escuchando más la voz de nuestro ego que la de nuestro corazón. Acaso aun ante la tempestad seguimos todavía buscando los bienes materiales, la admiración o aprobación de nuestros padres, el momento aquel que ya no regresara, la persona ideal que nos venga a salvar, el poder que me haga sobresalir sobre los demás, etc.

Mejor aun seria cuestionarnos de que es tiempo: ¿es tiempo de meditar? ¿es tiempo de perdonar o pedir perdón?, ¿es tiempo de agradecer?, ¿es tiempo de permanecer en silencio?, ¿es tiempo ya de mirar al interior para así llevar acciones al exterior?

Cada quien tiene sus propias preguntas y respuestas que hacer y contestar en la sinceridad del corazón. Lo que si me queda claro es que el tiempo de la preparación ha terminado, estés o no estés listo. Lo que haz logrado ya es hora de ser aplicado, primero en ti y después en los demás.

Por eso lo que busca este humilde llamado es la unión de tu corazón y mi corazón con el de los demás, ya que la espiritualidad que nuestra humanidad necesita se encuentra en la Unidad. Dios es amor, ama a tu prójimo, somos un solo corazón. Son palabras que los grandes maestros han hecho a través de todas las eras.

Así pues les digo que no es un momento de temer, es un tiempo de accionar. De ir mas allá del ego o la disposición o disponibilidad. Estamos ante una fecha constante en el universo que nos apremia en la que solo tú serás tu ángel y salvador si en tu cielo encuentras el amor.

Únete al amor y no pierdas más tiempo ya. Busca accionar tu trabajo espiritual con los grupos de tu localidad o las personas más cercanas a ti, date un momento de espiritualidad en la Unidad grupal. Comparte tu amor y tu búsqueda en la conciencia con otros seres afines o no afines a ti y establezcan acciones de luz y amor para que el balance de nuestro planeta se restablezca en la mejor armonía posible. No olvides que el tiempo en que se te necesitan en la Unidad es HOY, aquí y ahora. Amén.




Psic. Juan Pablo Morales L.

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